“No puedo hablar con mi vos sino con mis voces”
Alejandra Pizarnik
Y en mi bajar los ojos y subirlos
supiste, cual vivido y cual soñado,
como tejiendo un lazo almibarado
abrió tu beso nidos a los mirlos.
Y casi sin quererlo, permitirlos
en acróbatas vuelos, abrazado,
fue sentido mi cuello amotinado
hasta ser entregado, recibirlos.
Y bajo tu susurro, blanca luna,
se tornaron frutillas en mis labios
dejando sed de mirlos atrapados.
Y fuera casi sensación de cuna
que lleva como a tientas en presagios:
cuanto más libres son, más enjaulados.
Eva Ruiz